lunes, 12 de enero de 2009

Escalera



A veces podemos sacar partido de lo que, a priori, no son más que defectos. Por ejemplo, una cama deshecha siempre me parecerá más fotogénica que una impecablemente dispuesta, igual que una pared rota me gusta más que otra que muestra un enlucido reluciente, etc.

La peculiar luz que hay en cierto tramo de la escalera del edificio donde vivo proviene de una bombilla desnuda, que está así sencillamente porque nadie repara la lámpara que debería cubrir sus lumínicas vergüenzas. El caso es que ayer por fín encontré algo de tiempo para hacer fotos en esa zona de la escalera, y ésta que pongo aquí me gustó especialmente. Eso sí, al trípode le he cogido una manía que no veas (¡qué pesadilla montarlo sobre los escalones con la limitación de espacio!), y además me pasé el resto de la noche soñando que subía y bajaba sin descanso ese tramo de escalera para darle al p**o interruptor de la luz.

3 comentarios:

humanobserver dijo...

wow ! looks quite artistic....

Víctor Aranda García dijo...

It is. And beleive me it was hard to take, trying to arrange my tripod over the steps on the right place... And then 30 seconds of exposure!

CriS dijo...

vaya.... está realmente interesante y curioso.... te costó esfuerzo pero te ha dado un resultado fabuloso... genial!